El politólogo y consultor político Belarminio Ramírez Morillo dijo hoy que los legisladores y alcaldes de la República Dominicana atraviesan por un momento difícil, ya que corren el riesgo de perder sus curules y sus puestos en las alcaldías en las elecciones del 2016, debido a que los líderes nacionales de los principales partidos han guardado la razón y sólo están pensando en sus egos.
El catedrático universitario dijo que 64 de 77 diputados que tienen los partidos PRD y PRM han tratado de recuperar el buen juicio, y por eso firmaron un documento donde expresan el deseo de que ambas organizaciones concurran aliadas en los niveles congresionales y municipales, y de inmediato, las reacciones de Hipólito Mejía y Miguel Vargas Maldonado no se hicieron esperar, parándolos en seco como si ellos fueran muchachos que no tienen derecho a la reflexión sobre el futuro de sus carreras políticas y de la Nación.
El politólogo dijo que un porcentaje importante de los diputados y senadores del PLD también están preocupados y llenos de incertidumbres, ya que están conscientes que el único liderazgo que puede arrastrarlo y ayudarlos a que preserven sus puestos es el presidente Danilo Medina, pero ninguno se atreve a pedirle a su líder Leonel Fernández que reflexione y entre en razón.
El estudioso de la conducta política y electoral dijo que es normal que los liderazgos dominicanos en la medida en que avanzan en edad se tornen más egoístas y piensen más en sus egos que en el beneficio de sus organizaciones, de sus allegados y del sistema democrático.
Expresó que los legisladores y alcaldes son las columnas centrales de la democracia representativa y de la partidocracia, y por tanto, no es justo que los líderes nacionales les pongan términos a sus espacios y a sus carreras políticas, bajo el chantaje de que sino les hacen el juego les tipifican como desleales.
Ramírez dijo que en la democracia la lealtad debe ser al sistema, a las instituciones del sistema, a los principios y valores en que se sustenta la democracia, al pueblo que es el soberano y el principio y el fin, y no a los caprichos, egos y vanidades de los líderes.
“Aquí tenemos un problema serio de cara al futuro. En los partidos el mérito de los dirigentes significa poco, el común denominador para ascender es el arrodillamiento, la falta de cerebro y pro actividad.
Ahora como Danilo Medina se ha erigido en el principal líder de la sociedad dominicana, y que todo parece indicar que gravitará por mucho tiempo, deberá demostrar si será igual o diferente a los otros”’
reflexionó el consultor y experto en marketing político.
Ahora como Danilo Medina se ha erigido en el principal líder de la sociedad dominicana, y que todo parece indicar que gravitará por mucho tiempo, deberá demostrar si será igual o diferente a los otros”’
reflexionó el consultor y experto en marketing político.
El escritor dijo que se había hecho la ilusión de que Leonel Fernández marcaria una diferencia con respecto a esa conducta y patrón de compartimiento, pero sin embargo, está dando señales que no son buenas, y que después de ganarse el galardón del liderazgo más exitoso del ciclo histórico, ahora luce afanado en reducirse y empequeñecerse sin justificación alguna.
El politólogo dijo que detrás de Leonel Fernández hay una cantera de mujeres y hombres valiosos, con la carrera, la experiencia, la capacidad y las competencias para comenzar a promoverse en busca de la candidatura presidencial, pero ante la aptitud del líder, que con sus señales todo parece indicar que sólo está pensando en él, y que no les reconoce méritos a sus subalternos, estos liderazgos llamados a ser sus relevos, aunque no lo digan, están pasando por momentos decepcionantes.
“Un líder es grande y trascendente cuando deja un legado de discípulos y comienza a triunfar a través de ellos, pero en el liderazgo dominicano todavía no ha llegado a ese nivel. Estos piensan que tienen que ser ellos o que venga el mal, porque sólo ellos sirven” dijo Belarminio Ramírez Morillo.
