Desde Brinquito Cruzando por Biran
Nos encontramos en la antesala de un nuevo año, los movimientos vistos por ustedes, debemos darlos precisos en la vida, para evitar de cometer los menos errores posibles. El hijo enfreta a su padre, en un juego amistosos, en el local de la Federación Dominicana de Ajedrez (FDA), tal como existe un concepto, «si el alumno no aprendió, fue porque el Maestro no enseñó «.
Eso ocurrió, mientras me reunía con los jugadores juveniles, que finalizaban del torneo nacional, organizado por la FDA, del 19 al 21 de diciembre.
Los ajedrecistas barahoneros, tras interactuar en la evaluación del torneo, el cual resultaron en los lugares no correspondientes. Se comprometieron estudiar individual a los fines de ocupar los premios que establecen las bases dél torneo.
Finalmente, se sorprendieron cuando Enmanuel Peña Feliz, mi prole, me invito a jugar una partida, vieron como él, aplicaba los principios del ajedrez, luego de varios años sin jugar. Se comprometió integrarse a los estudios del ajedrez.
